Taonius borealis, el calamar con tupé y ojos desproporcionados

¿Quién no ha probado nunca un delicioso plato de calamares a la romana, rebozados y con limón? Una delicia sin duda alguna. Pero…¿A que cuando piensas en un calamar se te viene una imagen de un animal alargado con tentáculos, sin nada en especial? Pues he de decirte que el invitado de hoy a nuestra sección de monstruos marinos es bastante especial. Realmente no es un “monstruo” acorde a la definición de la palabra, es más bien un animal gracioso con un aspecto más bien cómico, probablemente el Taonius borealis sea el calamar con más estilo y con el diseño más original que haya en los mares. Este curioso animal fue descubierto en 1972 y debido a su extrema rareza aún no se le ha otorgado un nombre vulgar, por lo que solo podemos referirnos a él con su nombre científico.

Por el momento solo se ha visto a este calamar en aguas del Pacífico norte, a una profundidad aproximada de 1500 metros en las zonas del mar de Bering y los alrededores de California. El Taonius borealis mide aproximadamente medio metro (50cm) y su dieta se piensa que es similar a la de la mayoría de calamares de otras especies, es decir, que se alimenta de pequeños peces.

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Su maravilloso tupé estilo años 50 no es ni más ni menos que sus propios tentáculos que los pone de esa manera para nadar y que no sean un obstáculo en su campo de visión. Pero sin lugar a dudas, la característica más impresionante que tiene este calamar son sus gigantescos ojos.

Sus desproporcionados ojos son una adaptación a su hábitat de eterna oscuridad, se cree que para captar más luz y ver mejor. A demás, los ojos del Taonius borealis tienen una increíble propiedad, se pueden desplazar desde los laterales de la cabeza hasta situarse mirando al frente uno al lado del otro. Este calamar utiliza esta propiedad para poder abarcar un mayor campo de visión y así, por ejemplo, cuando ve a una presa puede mover sus ojos hacía delante y poder focalizar mejor a la presa y tener una mayor probabilidad de éxito en su caza.

Al igual que la mayoría de los animales que viven en las profundidades oceánicas, el Taonius borealis emite luz con unos órganos llamados fotóforos, es decir, tiene biolumiscencia, probablemente utilice la luz para atraer a sus presas.

Se sabe muy poco sobre el Taonius borealis, probablemente se deba a que solo se halla en una pequeña zona del planeta y es muy complicado verlos en libertad o, lo más probable, es que se deba a los elevados costes económicos que supone investigar a esas profundidades.

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