Las Boat Party en el punto de mira de las autoridades

Las boat party son al verano como las sombrillas y las toallas, un elemento que se ha convertido en imprescindible en una buenas vacaciones en la playa.

Desde que comenzaron a estar de moda estas fiestas en barco o boat party, no han venido exentas de polémica.

Como todo tipo de fiestas, divierten a quienes las están disfrutando, pero molestan a la gente que no se encuentra en ellas, pero ¿cuál sería el punto de equilibrio?.

Desde que hace un par de años sucedieran algunos accidentes en estos barcos debido al consumo de alcohol y drogas de forma excesiva, nos hace pensar que por culpar de unos cuantos descerebrados que no saben dónde está el límite de lo aceptable y empresas sin escrúpulos que superan la capacidad de los barcos, ¿tenemos que pagar todos?

En zonas como Cataluña, se controla el consumo de alcohol en estas embarcaciones y la vigilancia costera sobre las fiestas es bastante férrea.

En lugares como Formentera, recientemente se han prohibido las party boat en un pleno del Parlament balear en sesión extraordinaria y en aplicación de la Ley de Evaluación Ambiental de Balears.

Las medidas aprobadas prohíben la realización de «fiestas en barcos» en todas las zonas protegidas del archipiélago y esto afecta especialmente a las party boats.,

Esta decisión blinda Formentera contra esta actividad debido a que el cien por cien de su litoral está protegido a través de seis figuras europeas, calificadas de Lugar de Interés Comunitario (LIC), además del Parque Natural de ses Salines y de la Reserva Marina de es Freus.

Sin embargo, la prohibición en Ibiza sólo afecta al 30% de su litoral, teniendo en cuenta que es la isla de Balears que menos kilómetros de costa y superficie de mar tiene protegidos, lo que incluye la parte correspondiente del Parque Natural de ses Salines, el Parque Natural de es Vedrà y es Vedranell y dos franjas de litoral calificadas LIC en Sant Antoni y Santa Eulària.

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Esa misma prohibición llega al 50% del litoral de Mallorca y a cerca del 60% en el caso de Menorca.

Teniendo en cuenta estos datos, ¿cuál es el futuro de las boat party? ¿Vale la pena establecer más controles o hay que eliminarlas definitivamente? Sea como sea, no dejemos de disfrutar del mar mientras podamos.