Volvo Ocean Race, triste herramienta de corrupción en España

La vuelta al mundo a vela que sale desde la ciudad española de Alicante se ha destapado como una herramienta de corrupción donde la clase política de este país hacía y deshacía a su antojo para llenarse los bolsillos con lo ajeno. ¿Se merece esto la Volvo Ocean Race?

Uno de los eventos deportivos más importantes a nivel mundial como la Volvo Ocean Race llegó a Alicante en la década donde España era el centro de los eventos más importantes del mundo. A parte de la Volvo Ocean Race, la America’s Cup, la Audi Med Cup y la Fórmula 1 se afincaban en la Comunidad Valenciana siendo la envídia de hasta los Emiratos Árabes.

Hoy la prensa española se ha llenado de artículos donde se han sacado a la luz parte del entramado de empresas públicas y privadas que servían para que una trama de indeseables se lo llevasen crudo.

Dentro del mundillo de la vela, los corrillos ya pronosticaban hace años que tarde o temprano esto iba a explotar, ya que, por ejemplo, no es normal que una salida como la de la Vendee Globe, multitudinaria donde las haya dentro de la vela oceánica, costará una fracción ínfima de lo que ha costado cada una de las salidas de  la Volvo Ocean Race desde Alicante.

Simplemente viendo los números que edición tras edición se han ido sacando a la luz sobre los costes sobre esta regata oceánica, era bastante evidente que la gestión, como poco, era deficitaria.

La llegada de un nuevo signo político autonómico con ganas de saber, ha hecho que la burbuja haya estallado. Calibrar hasta donde puede llegar esta onda espansiva es complicado, pero lo que está claro es que este evento náutico deportivo va a estar en los medios de comunicación de forma continua, y no precisamente a nivel deportivo…

Los primeros números que han saltado a la palestra son los 32 millones que ha costado al gobierno de la Comunidad Valenciana…o sea, a los contribuyentes. Y eso que lo que se vendía era que la Volvo Ocean Race tenía coste cero para los valencianos. Simplemente vergonzoso.

Periodistas con ganas de verdad, apoyados por los políticos de la nueva era y asesorados por profesionales de la náutica, son el caldo de cultivo para que la Volvo Ocean Race pueda tener una segunda oportunidad en España. Reto difícil, pero sin lugar a dudas interesante.

Lo bueno es que la salida del 2017 esta firmada y se hará desde Alicante, pero ahí se acabó el compromiso de esta regata oceánica con España. La Volvo Ocean Race vino a España por dinero y ahora otros destinos, como Portugal, están dispuestos a dar más.  ¿Tú que opinas?