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Vendee Globe 2012. Mala noche…. chubascos y la mar cruzada obligan a los navegantes a incesantes cambios de velas

4 diciembre 2012

Si el récord de Jean Le Cam en el ecuador no cayó, el de Buena Esperanza sí que ha cambiado de propietario. Armel Le Cléac’h (Banque Populaire) seguido como su sombra por Jean-Pierre Dick (Virbac-Paprec 3) y François Gabart (MACIF), ha destronado a Vincent Riou, que ostentaba la marca de referencia entre Les Sables d’Olonne y la punta sur de África.

Pero para el trío de cabeza inmerso en una lucha de intensidad poco común, esta gesta podría quedar como simple anécdota y no ser valorada sino al cabo del tiempo. Su preocupación actual es doble: por una parte se trata de hacer una comprobación seria de una material fuertemente maltrecho estos días navegando a gran velocidad. Por otra parte, se trata de anticipar la mejor trayectoria posible para bordear un anticiclón que parece acomodarse sobre la puerta de Crozet. Se les presentan dos opciones: intentar cortar por lo sano para alcanzar el extremo oeste de la puerta y lanzarse enseguida hacia el sur, o bien intentar bordear el anticiclón por su cara meridional para llegar a la punta oriental de la misma puerta.

En el primer caso, el mayor riesgo es caer en la trampa de las calmas. En el segundo, los programas de ruta aconsejan una ruta muy al sur, pasando a través de campos de icebergs detectados entra la isla Heard y el archipiélago de Crozet. Nadie está obligado a ser tan radical y la parte de libertad reivindicada por algunos navegantes va a encontrar aquí un medio de expresión privilegiado.

La noche no ha debido de ser un escenario de descanso para los patrones de la Vendée Globe. En cabeza, los chubascos y la mar cruzada obligan a los navegantes a incesantes cambios de velas. Mientras los velocímetros vuelven a animarse en la cola de la flota, que por fin se escapa del anticiclón de Santa Helena, Mike Golding (Gamesa), Jean Le Cam (Synerciel) y Dominique Wavre (Mirabaud) pasan esta mañana la primera puerta de hielo.

La regata vive sus días más complicados. Los navegantes, cuando los primeros ya han entrado en el océano Índico, tendrán que navegar a partir de ahora lejos de todo y en condiciones difíciles. No romper nada, mantener su barco sin perder la velocidad óptima para que los rivales no te dejen atrás… ese es el dilema, el punto medio que tienen que encontrar. Una regata pura en una regata con perfume de aventura.

Armel Le Cléac’h (Banque Populaire), siempre en cabeza, registra esta madrugada una velocidad de más de 18 nudos, 33 millas delante del segundo, Jean-Pierre Dick (Virbac Paprec 3), que avanza a 19,5 nudos, la misma velocidad que François Gabart (MACIF). Pero ya no están solos. Bernard Stamm (Cheminées Poujoulat) se acerca al espejo de popa del joven primerizo, que tiene a menos de 10 millas.

Unas 500 millas más atrás, Javier Sansó (ACCIONA 100% EcoPowered) se ha liberado por fin de los caprichos de Santa Helena. Navega a más de 16 nudos, más tranquilo después de aprovechar el poco viento de esos días para hacer algunas pequeñas reparaciones (cambio de sables en la mayor, entre otras cosas).

La noticia más destacada en la cola de la flota es la posición ganada por Bertrand de Broc (Votre Nom Autour du Monde avec EDM Projets), ahora undécimo, a costa de Tanguy de Lamotte (Initiatives Coeur). Su diferencia en la clasificación es de apenas 3 millas, aunque sobre el mar estén a más de 100 millas uno del otro. Cosas de las matemáticas.