Un gigantesco iceberg se desprendió de la Antártida el pasado 12 Febrero

Un gigantesco iceberg del tamaño de Luxemburgo se desprendió de la Antártida hace dos semanas y su deriva podría alterar las corrientes oceánicas en todo el mundo, según un estudio científico publicado este viernes. Como los océanos actúan como un volante gigante para el clima del planeta, (alternando el calor a lo largo del globo a través de las miles de corrientes por encima y debajo de la superficie), esta cantidad ingente de agua provocara que los niveles de oxígeno que alimentan las corrientes oceánicas del mundo cambien y la reversión de la circulación responderá a ese cambio. La observación del fenómeno nos permitirá mejorar las predicciones sobre el cambio climático futuro.
A pesar de que el impacto no se sentiría hasta dentro de varias décadas, una disminución en la velocidad de producción de agua fría y densa podría resultar en inviernos menos templados en el Atlántico norte, señalaron los investigadores.
El bloque de hielo, de 2.550 kilómetros cuadrados, se desprendió el 12 o el 13 de febrero del Glaciar Mertz, un cuerpo de hielo flotante de 160 kilómetros de largo que emerge de la Antártida oriental y se extiende sobre el Océano Antártico al sur de Melbourne, informaron los científicos.
El iceberg gigante recibió el nombre científico de B-15-K y se encontraba en observación desde hace tiempo. El desprendimiento es uno de los mayores registrados en los últimos años, y un fenómeno de estas proporciones sólo pasa una vez en 50-100 años. En 2002 un iceberg de unos 200 kilómetros se separó de la Antártida. En 2007, un iceberg del tamaño de Singapur se separó del glaciar Pine Island en la Antártida Occidental.
Los científicos han señalado que las temperaturas del agua son extraordinariamente cálidas en esta zona. Y según los investigadores, el desprendimiento y la fragmentación del enorme sector helado producirán el consecuente aumento del nivel del mar.
Un investigador del CSIC y jefe científico de la campaña ATOS, ha explicado que están «constatando evidencias de una producción biológica muy elevada en la zona donde se están recibiendo los hielos liberados; por un lado, la presencia de fauna es muy abundante, con la mayor concentración de ballenas yubarta y focas leopardo  que hemos encontrado hasta el momento». 
Este científico ha recalcado el empeño del equipo de comunicar a la sociedad los resultados científicos, pero también «nuestras experiencias personales para que compartan nuestra preocupación y puedan así comprometerse con la reacción necesaria».