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Mundial de Natación 2013. Orlando Duque: “El corazón se me sigue acelerando antes de cada salto”

27 julio 2013

Orlando Duque - Action

“Hay tiempo de rectificar. Pero muy poco. Lo suficiente para intentar agruparse al máximo, reducir el tamaño del cuerpo, y no caer plano en el agua.” Así es un salto desde los 27 metros de altura según Orlando Duque, el high diver colombiano nueve veces campeón de las World Series de dicha disciplina y en posesión de dos Guiness World Records: el de mayor participación en un mundial y el de más alta calificación en un campeonato (10). Duque será uno de los saltadores o ‘clavadistas’ -como se les conoce en su tierra- que participarán en el evento de High Diving de Barcelona 2013 que tendrá lugar en el Moll de la Fusta los día 29, 30 y 31 de julio, a partir de las 4 de la tarde.

Duque es, además, uno de los atletas que más ansía el título de campeón del mundo, como explicaba hoy durante la conferencia de prensa que ha ofrecido en el Palau Sant Jordi como miembro de la Comisión de High Diving de estos 15os FINA Campeonatos del Mundo de Natación: “Poder estar aquí es fantástico, y que el high diving entre a formar parte de unos mundiales es un reconocimiento que nos faltaba. Yo personalmente iré a por todas, quiero esta medalla porque es la única que me falta, y soy el saltador de mayor edad”, respondía a los numerosos periodistas que le requerían.

Como muchos de los saltadores de 27m hoy en día, Duque comenzó con el salto tradicional, hasta llegar a los 10 metros, y de ahí subió a los 27, lo que le llevó ni más ni menos que tres años. “Lo más difícil es controlar la velocidad, porque a partir de 15 metros la aceleración es tal que tienes que estudiar el salto partiéndolo en trozos”, explicaba. El salto dura sólo 3 segundos, y el impacto con el agua es de 85 kilómetros por hora, decelerando a cero en 1,5 segundos. “Ésta es una de las razones por las que la caja torácica tiene que estar especialmente bien trabajada, por la descompresión que el frenado provoca. Siempre entramos de pie pues el tronco inferior es mucho más fuerte que el superior. Ha habido saltadores que lo han probado de cabeza, y, desafortunadamente, alguno ha acabado con serias lesiones en la espalda”.

Otro punto crítico, junto al ‘amerizaje’, que tiene que ser totalmente vertical, es no desorientarse en el aire. “Si lo haces esto te puede llevar a entrar mal, el mayor de los peligros”, puntualizaba, a la vez que admitía que sigue teniendo miedo cuando salta. “Sí, sigo sintiéndolo, en menor medida que la primera vez, que fue aterrador. En realidad a mí me ayuda, me concentro más, y tenemos técnicas para controlarlo. Una gran parte de nuestra preparación es psicológica. Pero que el corazón se sigue acelerando”, detallaba. Lo mismo que les ocurrirá, probablemente, a los que acudan a disfrutar de uno de los espectáculos acuáticos más impresionantes que existen hoy en día.

Foto: Vincent Curutchet/Red Bull Cliff Diving