La natación sincronizada sigue hablando ruso pese a la «Pasión Española»

El espectacular ‘combo’ ha puesto hoy punto final a la natación sincronizada en Barcelona 2013. La última de las siete medallas de oro en juego volvió a tener el mismo dueño: Rusia. España y Ucrania ocuparon los dos siguientes puestos, repitiendo lo ocurrido en las dos rutinas de equipo. Las grandes triunfadoras de estos Mundiales han sido las dos Svetlanas rusas, Romashina y Kolesnichenko, con cuatro oros cada una. Sin embargo, la ‘sirena’ que ha recogido más medallas del fondo de la piscina ha sido la local Ona Carbonell: siete en total, la última de ellas, de plata, en la jornada de cierre

La natación sincronizada sale reforzada de estos 15os FINA Campeonatos del Mundo. El monumental marco del Palau Sant Jordi, hoy casi abarrotado (8.783 espectadores), le ha dado a esta disciplina acuática un fuerte empuje mediático que relanzará su imagen internacional. Sobre todo después de esta última jornada, en la que equipos de diez nadadoras exhiben todo lo que coreografía, música, sincronía, belleza y plasticidad puede verse en el agua. Y de ella, las que más logran acercarse a la perfección siguen siendo las nadadoras rusas.

Sin necesidad de nadar (fue reserva en la final) Svetlana Kolesnichenko obtuvo su cuarto oro aquí para igualar a otra Svetlana, la Romashina. Incluso sin ambas, la decena rusa ha vuelto a cautivar a un público entregado. Rusia reiteró que está en otra galaxia, y que a España (plata), Ucrania (bronce), Japón, Canadá, Italia o a la ausente China, aún les falta mucho para poder perder el favor de jueces y espectadores. Rusia recibió 97.060 puntos y formó con Vlada Chigireva, Mikhaela Kalancha, Daria Korobova, Alexandra Patskevich, Elena Prokofyeva, Alla Shishkina, María Shurochkina, Alexandra Zueva, Anisya Olkhova y Anzhelika Timanina.

«Hemos repetido los resultados de hace dos años en Shanghai. Nuestro objetivo es volver a hacerlo en Kazan 2015, aunque para ello debemos cambiar coreografías y renovarlo casi todo», comentó Kolesnichenko, que aunque no estuvo en el agua sí acudió a la sala de prensa.

Al margen del póker particular de cada una de las Svetlanas, la otra gran triunfadora en Barcelona2013 ha sido precisamente una barcelonesa: Ona Carbonell. Su botín no es de oro, pero sí cuantioso: 7 medallas sobre 7 posibles, de ellas 3 de plata y 4 de bronce. Detrás de ello, un gran trabajo, un notorio desgaste físico y mucha voluntad. Carbonell, de 23 años, ya medallista olímpica en Londres 2012 (plata y bronce), ha repetido las gestas de Gemma Mengual o de Andrea Fuentes, las anteriores líderes de una sincronizada española que ya tiene un nuevo apellido con el que soñar.

España, que arrancó los mejores aplausos del público con un medley de Elvis Presley, recibió de los jueces 94.620 puntos y ha formado con: Clara Basiana, Alba Cabello, Marga Crespí, Thais Henríquez, Paula Klamburg, Meritxell Mas, Laia Pons, Cristina Salvador, Sara Levy y Ona Carbonell. «Si alguien dudaba de que no podíamos conseguirlo, creo que hemos dado el callo y lo hemos conseguido», resumió con orgullo Alba Cabello.

El bronce volvió a ser para Ucrania (93.350 puntos), que se va de Barcelona con tres metales demostrando que habrá que seguir contar con ella en el futuro, en lucha con españolas y chinas. «La mitad de nuestro equipo viene de los Mundiales Juniors», advirtió, al respecto, Olena Grechykhina. La ausencia de las chinas en las pruebas de equipo no resta mérito al equipo, formado por Lolita Ananasova, Maryna Golyadkina, Olena Grechykhina, Ganna Klymenko, Olha Zolotarova, Oleksandra Sabada, Kateryna Sadurska, Anastasiya Savchuk, Kateryna Reznik y Anna Voloshyna.