La isla de Tabarca está situada al sur de la ciudad de Alicante. Su relieve es plano y tiene una altura máxima de 15 metros sobre el nivel del mar.
En ella está situada la Reserva Natural que lleva su nombre y que se extiende a lo largo de 1.4oo hectáreas. Podemos destacar la riqueza en fauna y flora, como los grandes bancos de Posidonia Oceánica que son el alma de la gran vida existente en las aguas de esta isla.
Entre su fauna más peculiar encontramos los meros y las doradas, las langostas, estrellas de mar y las tortugas bobas.
Esa gran variedad de fauna marina, confiere a Tabarca de una gastronomía de gran calidad, recomendando el magnífico «Caldero Tabarquino» y sus sabrosísimos pescados en algunos de sus restaurantes, antiguas casas de pescadores.
El gran valor de esta pequeña isla, que mide 1.800 metros de largo por 380 de ancho, es la tranquilidad y la naturaleza. Un lugar perfecto para olvidarse del stress y volver a cargar energía positiva.
La climatología, gran aliada de esta isla, permite su visita a lo largo de todo el año para disfrutar de sus aguas cristalinas y su gente entrañable.
La forma de acceder a la isla es evidente y única. Una serie de embarcaciones, tipo catamarán a motor, con capacidades entre 150 y 350 pasajeros, recorren el trayecto entre la península y Tabarca. Los puertos de embarque suelen ser Alicante y Santa Pola. Los trayectos oscilan entre 30 y 50 minutos.
Para empresas y grupos, SBR Events & Incentives, tiene proyectados diversos programas para poder disfrutar de la isla de Tabarca.
Como primera opción destacamos un incentivo náutico precioso. Saliendo del puerto de Alicante, el grupo se dirige a Tabarca disfrutando de una travesía en veleros para fondear en el puerto de la isla al cabo de una hora aproximadamente.
Una vez desembarcados, se realiza una visita guiada por la isla para terminar en un restaurante para realizar un almuerzo marinero.
Al regresar a puerto, se propone la realización de una regata corporativa para la empresa. Se realizaría una salida sincronizada para poner rumbo a la linea de llegada en el puerto base donde se realizaría la entrega de trofeos.
Una variante de este incentivo náutico es la realización del evento por la tarde, compitiendo en la regata en primera instancia y realizando una travesía nocturna en veleros en veleros hasta el puerto de Alicante.
La segunda opción, más tranquila, es realizar una travesía en una embarcación de gran capacidad donde los participantes disfrutarán de la ruta al mismo tiempo que se les ofrece un catering a bordo.
Una vez se llega a tierra firme, se les realiza una visita guiada a la isla de Tabarca para posteriormente volver al puerto base.
Estas dos propuestas de incentivos náuticos de empresa son creativas, económicas y adaptables a las necesidades del grupo participante.
Editor especialista en el deporte de vela, tanto en vela oceánica como en vela ligera y olímpica. Colaborador de prensa deportiva a nivel nacional.