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Grandes la tripulación francesa del Groupama. Un tercero que sabe a victória

10 abril 2012

La tripulación del Groupama comunicaba a Control de Regata la rotura de su palo a la altura de su primera cruceta. Eran poco más de las 17:30h del miércoles, 6 de abril. En aquel momento, lideraba la Etapa 5 en un intenso mano a mano con el PUMA a falta de apenas 600 millas para completar el recorrido de 6.705 millas entre Auckland e Itajaí. Se encontraban a 60 millas de Punta del Este (Uruguay).

Tras poner su regata en suspenso, el Groupama se dirigía a tierra, donde la tripulación y parte de su equipo de tierra fabricaron un aparejo de fortuna con los restos de su mástil roto con la intención de completar la etapa y sumar el mayor número de puntos posible.

Una vez completada la operación, soltaron amarras en Punta del Este a las 23:30h del pasado viernes rumbo al punto en el que había puesto su regata en suspenso apenas día y medio antes. A las 08:30h del sábado, el barco de Franck Cammas se reincorporaba oficialmente a la Etapa 5 para iniciar el camino de cerca de 600 millas náuticas hasta la línea de meta en Itajaí. Navegarían con tres rizos en la mayor y una combinación de velas cuando menos curiosa para adaptarse a su peculiar aparejo artesanal, terminando esta quinta etapa en una tercera posición que sabe a victoria por lo trabajada que ha sido.

El Groupama completó la recta final de la Etapa 5 con sólo siete tripulantes a bordo. En Punta del Este se bajaron el navegante Jean Luc Nelias, y los timoneles/trimmers Phil Harmer, Laurent Pagès y Thomas Coville.

“We love Punta del Este”

Una de las velas izadas en el aparejo de fortuna del Groupama lucía a su llegada “we love Punta del Este”, un guiño de agradecimiento del equipo de Franck Cammas a las gentes del puerto uruguayo que les prestaron su ayuda cuando tuvieron que desviarse a tierra con el palo roto el miércoles pasado.