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Anne Quéméré sigue sin desanimo su ruta, sin comunicación y con el timón roto

3 mayo 2011

Ronan Quéméré

A 61 días de navegación desde su salida del Perú y 3 072 millas recorridas, es decir aproximadamente los 3/4 de su travesía, Anne va abordar dentro de poco (unas 690 millas) el archipiélago de las Tuamotu por el norte, entre los atolones de Napuka y de Puka Puka. Un acceso especialmente delicado en el contexto de su aventura digna de las grandes expediciones de antaño, pues totalmente sola y sin posibilidad de ser guiada, ya sea para la ruta o las condiciones meteorológicas. La valiente Anne, continúa sin poder comunicarse con nadie y su timón averiado.

Ella sabía en el momento de partir, que este archipiélago era la parte más difícil de este Desafío Adrien, teniendo en cuenta la presencia de múltiples atolones con sus innumerables arrecifes que implican  mucha atención y una gran rapidez en la maniobra.  ¡Pero no imaginaba siquiera tener que abordarlos en estas condiciones!

Desde hace unos diez días, avanza de forma regular y realiza entre 50 y 60 millas náuticas diarias. Empujada por vientos de alrededor de 18-20 nudos y un oleaje ¾ por popa, mientras que durante casi la mitad de su recorrido Anne había tenido que enfrentar un oleaje cruzado y vientos caprichosos. Condiciones que deben reforzar aún más su ánimo y determinación.
A este ritmo, podría llegar a las proximidades de las Tuamotu en unos 10 o 12 días.

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